viernes, 28 de octubre de 2011

Armisticio.

He claudicado
entrego mis armas
puedes lanzar la llave al mar
y mirar la luz cuadriculada
en mi rostro
tras los barrotes
preso en tu leve sonrisa
de amable carcelero
todavía quedan restos
de las lágrimas secas
bajo el dolor
de aquella inquietante soledad
en el vacío
hay un túnel para regresar
tras los baños bajo la luna
de la libertad
no me sigas
aunque lo encuentres
o moriremos
con los brazos desnudos
y ahogados en la mentira
de esta paz.