Tápale los ojos al niño
que no leímos la letra diminuta
del contrato
y hoy viene de visita el uniforme
a robarnos la vida.
Dile que nos vamos de aventuras
a jugar por las calles
sin juguetes
a comer en restaurantes cada día
y a buscar pañuelos de papel
en los contenedores de reciclaje
cuando no nos miren.
No hay comentarios:
Publicar un comentario