martes, 29 de marzo de 2011

Los demonios.


El alma ha muerto
entre las telarañas
de las ideologías
el ángel de la guarda
anidado en un hostal
de mala muerte
la carne, las alas
y un fajo de billetes
en el sostén

hay muerte
a un paso de la vida
tras las cortinas
del amor en venta
cabalga al ángel destronado
y llénate tus uñas con su sangre
que griten de dolor
sus ojos encharcados
araña el rostro viejo
y decadente
con tus rezos blasfemos
y huye rodando
en la botella
noche
que el alma ha muerto
ahogada
entre telarañas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario