lunes, 14 de febrero de 2011

Amanece.


Casi no hay nada.

Un número aleatorio
un código de barras
un tatuaje forzado
una marca de esclavo

un control rutinario
para escribir un verso
perverso

la luz encendida sobre el escenario
que debe empezar la función.

3 comentarios:

  1. muchas felicitaciones, lo estás haciendo muy bien según mi humilde opinión. Soy una compañera tuya en el tayer de escritura.
    Saludos, ánimo y adelante.

    ResponderEliminar
  2. ¡Gracias! Por ponerle una elle al taller y por tus amables palabras. Estoy disfrutando mucho y aprendiendo (eso espero) entre gente tan interesante.

    ResponderEliminar